Este fin de semana (el sábado para ser específicos), mi esposa y yo salimos a caminar por el centro de Madrid, a despejar la mente y distraernos de la rutina que nos está agobiando últimamente entre tanto master, estudios y trabajo.
Cada vez que camino por las calles de Sol y Opera, hay algo nuevo que ver, algo que se te ha pasado por alto cientos de veces que has caminado esa misma ruta. Pero ese no es el cuento de hoy, el cuento se refiere a los artistas urbanos, a los mimos callejeros, músicos de esquinas y personas que usan su creatividad de alguna forma posible para sacarte (voluntariamente) algunos céntimos del bolsillo.
El primero que me conseguí en el camino fue al Robocop europeo. Vestido con un disfraz que asemeja al heroe policía futurista de la famosa saga hollywoodense (pero chaborramente), se encuentra a unos centímetros por encima del suelo montado en una especie de taburete tapado por una manta negra. El mister está totalmente inmóvil, hasta que llega algun transeunte, le pone una moneda, y comienza a moverse, saca su pistola, y se deja fotografiar mientras hace movimientos graciosos. Yo le tomé varias, y hasta lo filme cuando me di cuenta que allí se apreciaría mejor su actuación, pero como que a él no le pareció muy buena la idea.
Mas adelante, me conseguí con un Cowboy, un vaquero. Sus movimientos resultaban graciosos y emulaba un baile de borracho alegrón típico de los Westerns italo/americanos que hace 4 décadas inundaron al género cinematográfico. Estaba maquillado todo como si fuese una estatua de bronce, y por cada movimiento que hacía, generaba un ruido como de metal, como si fuese una estatua oxidada en realidad. Bastante agradable, y se nota que las horas que invierte el tío en maquillarse no son pocas.
Mas adelante, justo en pleno corazón de Sol, estaba una banda de inmigrantes de Europa del Este tocando alguna música representativa de su folklore, mezclada como con una especie de Swing. Sonaban muy bien, eran aproximadamente 6 personas, con acordeón, saxo, trompeta, una pequeña percusión, y otros instrumentos que no se me vienen a la mente en estos momentos. No le tomé fotos, porque no se si se molestarían, y estos no eran un robocop que no podía moverse, además, eran del este de Europa, suficiente razón para no provocarlos.
Me disponía a subir por una calle emblemática del centro, que te comunica con Callao (donde está la tienda de música mas grande de Madrid, el FNAC, y uno de los Corte Inglés mas conocidos), pero había una manifestación en contra de los parquímetros, un tema que está en pleno auge en esta capital.
Después de bordear la manifestación, me topé con uno de los mimos urbanos más característicos de la zona. Es un tío que se queda totalmente inmóvil, y parece la foto de alguien que esta luchando contra una tempestad que lo encara. Siempre me ha parecido tremenda su idea, y como hace para simular su acto.
Como conclusión a esto, puedo deducir que aquí la gente si tiene creatividad para ganarse la pasta. Por supuesto nunca falta el típico hombre pidiendo dinero para su familia, o alguien lamentándose rogando por unas monedas, pero la mayoría buscan una forma creativa para no mendigar. Espero mi tema lo vea alguno de los punketos de semáforo que abundan en Caracas o en mi cuidad natal Valencia, y se den cuenta que no solo lanzando pines pueden conseguir un ingreso para el bolsillo.
9 comentarios:
Por la UCV yo he visto a un tipo que lucha contra el viento, es cómico, le hace publicidad a un grupo de teatro.
Y bueno, ahora que el bulevard de Sabana Grande está despejado, he visto a tres hombres estatua. Dos que son estatuas blancas cual encapuchados y un Chaplin (clásicos todos).
coño pero que actitud la del robocop ajajajajaj te pinto una paloma en tu cara ajajajajajaj
Excelente crónica urbana, minos. Particularmente me ha gustado mucho debido a una cercanía muy especial que tengo precisamente con las zonas de Sol y de Ópera. Definitivamente son las partes que más me gustan de Madrid, además de la Gran Vía que está cerquita. Muero por regresar a esa hermosa ciudad, por eso es que debo agradecer estos escritos que me acercan más a ella.
Un abrazo
Gracias por tus comentarios, Victor. Si te gustó, te invitó a pasar mas por mi blog, ya que como estoy residiendo actualmente en Madrid (y cerca tambien de esa zona), intentaré seguir colocando mas sobre esta magnifica Ciudad.
Ina, me alegra saber que de alguna forma están siendo mas creativos ahora.
Dhers, tu blog nuevo rockea demasiado.
Depinga,
Hago ecos: En mérida hay, a veces, más estatuas que gente, en el centro de la ciudad. En un semáforo, a veces unas cheerleader hacen lo propio con pomas y todo lo demás. Ah, sin olvidar al pana que salta la cuerda. Y sólo menciono los más "raros".
por eso Mérida será considerada siempre una de las ciudades mas bohemias de Vzla.
Me parece bien que tomen otras iniciativas. El asunto está en que no porque salga alguien a hacer de estatua viviente pintado de bronce, salgan mil a imitarlo, sino a ingeniarse su propio repertorio y su propio show. El problema en Valencia es que se han incrementado los malabaristas de semaforo, y todos hacen lo mismo, y hasta lo hacen mal.
En Mérida, también por la plaza Bolívar hay un grupo de chamos que tocan con guitarra, pandereta, bongos, un peine con un plástico sabes, castañuelas, y voz principal y coros, que rapean o algo así, pero siempre hablando de temas actuales del país y de la ciudad, y son groseros con el gobierno y cualquier autoridad que moleste (o que rime con la línea anterior)... son los que he visto que halan más gente, tocan canciones como de 10 a 15 minutos y descargan, la vaina es genial, lo que pasa es que se desaparecen a veces por un tiempo. Uno los piensa como aedos o bardos modernos, y se siente en otra época... así debe haber sido, digo yo...
Saludos!
Esos paseos nos inolvidables un dia en puerta del sol un español paso gritando a eso de las 10 de la noche a los inmigrantes africanos "a su país", eso me fastidio un poco, pero es que el centro esta tan lleno de gente que los españoles ya no se sienten en su tierra. Saludos y que disfrutes mucho Madrid.
JAjajaja marico no aguanto te pinto una paloma, aajajajajajajaja coño de la madre.
En resumen podemos decir que lo bohemio es directamente proporsional a la cantidad de psicotropicos que tengas a tu alcance.
TE PINTO UNA PALOMA ajajajajajajaja
Publicar un comentario